Calle13 en Guayaquil
Este 20 de abril del 2011, el Ministerio de Cultura de nuestro país trajo al artista reconocido de Puerto Rico «Calle 13» y preparó una presentación gratuita en Guayaquil y Manta, y tuve la suerte de asistir al primero, realizado en el Estadio Modelo Alberto Spencer. Las opiniones dichas aquí son personales y no espero que todos la compartan, es simplemente mi forma de ver el evento.
Empecemos con la cantidad de desinformación del evento, el cual no recibió tanta publicidad como debió, causando de esta manera confusión al momento de entrada, ya que nadie entendía cómo funcionaba el servicio de tickets, no estaba claro si estos eran necesarios o no, y cómo funcionaría la entrada al evento. Me di cuenta de la desorganización al pedir ayuda a personas encargadas del orden fuera del estadio, ya que ellos tampoco estaban al tanto de qué pasaría.
Las puertas finalmente se abrieron a las 4:30 pm, dejando entrar a una gran cantidad de gente que se había formado en las afueras del estadio. Creo que todos sabían de que el estadio estaría dividido en 2, la gente «normal», y los familiares y/o trabajadores del Ministerio y gobierno, quienes gozarían de puestos más adelante, VIP, por así decirle.
Pero al entrar me di cuenta de la exageración de este caso, el estadio estaba dividido a la mitad, y todos vimos el gran espacio que sobraba en la «zona VIP», es decir, realmente, si quieres igualdad para todos… ¿Fue necesario esto? Citando lo que un amigo dijo… «es que para nosotros es gratis, pero para ellos es más gratis», pero pronto cambiaría esto.
La separación, conformada por 2 rejas separadas aproximadamente por un metro, no fue excusa para la gente que sintió la injusticia que se cometía, y fue aquí cuando se empezaron a saltar las rejas, de un lado y otro, y aunque los policías trataban de detenerlos, era imposible, un movimiento en falso y tendrían una gran cantidad de personas armando un problema, así que después de 20 minutos de pelear, empezaron a ayudar a las mujeres a pasar para que no se lastimen, lo cual me pareció adecuado, es decir, no es que una localidad costaba más que la otra… Todo era gratis.
El tiempo pasó, y me dejaron saber que Luis Rueda y el Feroz Tren Expreso abriría el concierto. Y debo decir que aunque el espectáculo que dió no fue malo, y si se sintió la energía del grupo, no creo que una banda de rock fue la mejor elección para este evento. Con tantos artistas que tenemos, y la amplia variedad que estos ofrecen, me pareció que no fue una decisión adecuada por parte del Ministerio, y lo verificamos cuando la gente lo empezó a abuchear y gritar que se baje del escenario.
Obviamente creo que la falta de cultura del público no ayudó a la escena, y creo que Luis Rueda también lo supo manejar bien, tratando de enseñarle al público cómo se trataba a los artistas nacionales. Pero la gente no entendía, así que después de 40 minutos aproximadamente de show, Luis Rueda partió, dejando solo la espera de lo que se venía.
Media hora después visuales relacionados con el último disco de Calle 13 empezaron a aparecer en la pantalla, dejando una cuenta regresiva que culminaría con «Baile de los Pobres», canción con la cual el boricua abrió su concierto.
Debo decir que me sorprendió mucho, el frontman sabía dar su show, como todos ya conocían, pero realmente me impresionó la calidad de banda que tenía, empezando por «Visitante», quién tenía una gran cantidad de instrumentos, desde Guitarra, pasando por teclados, mandolina eléctrica y theremín, «PG13» que no solo tenía la voz, sino también la actitud, el guitarrista y bajista tocaron impecablemente, sabiendo cuándo o dónde hacer lo que hacían, su equipo de vientos, que dejaban a todos boquiabiertos, y la percusión bien hecha en cada una de las canciones.
Los visuales de la banda entera estuvieron increíbles, lo reconozco, y las cámaras estuvieron bien manejadas, todos incluído el cantante principal tenían cámaras que mostraban lo que estaban haciendo, y también debo recalcar que el escenario, sonido, e iluminación estuvo excelente, sí se preocuparon por buenos equipos, y se escuchaba bien si sabías donde pararte.
Por su parte, Calle 13, dio un muy buen show, aunque no esperaba nada menos en realidad, su presencia escénica y charla cautivaron al público que en muchas ocasiones se negaba a escuchar las inteligentes palabras que René, vocalista de la banda, trataba de decirles.
No mucho se dijo sobre las votaciones, en realidad nada, pero René si dijo cómo no se le debía temer a los políticos, sino ellos a nosotros, y cómo no darles el poder excesivamente, solo espero que la gente haya escuchado y no se haya preocupado mucho por bajarle el pantalón (cosa que realmente sucedió).
La banda tuvo una buena selección de canciones para tocar, tocaron sus éxitos más sonados de sus discos y no solo eso, sino canciones con mensajes, como «Latinoamérica» o «La Perla», aunque admito que extrañé «Calma Pueblo», realmente quería verla en vivo, pero no siempre se obtiene lo que se quiere.
Calle 13 cerró su espectáculo con «Fiesta de Locos» que puso a hombres, mujeres, homosexuales, bisexuales y heterosexuales a gozar, bailar y a sacarse las camisetas para corear la canción. Reconozco que aunque no es el tipo de música que normalmente escucho o el típico concierto al que iría, Calle 13 es una banda que sabe hacer música inteligente con mensajes profundos disfrazados en música popular, para mi son un orgullo Latinoamericano.
El espectáculo estuvo increíble, pese a la mala organización y problemas dados, creo que todos pudimos disfrutar. Me gustaría ver más cosas así en Guayaquil, aunque tal vez con más participación de artistas nacionales, es decir, por qué seguir gastando dinero en artistas internacionales (que no digo que no, vale la pena) si tenemos una amplia selección de artistas acá que no solo son Pop y salen en Mtv, sino que no piden nada más que una simple oportunidad.
Fotos: Camille Gamarra
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